Era el dia mas esperado de los ultimos años y sobre todo de los ultimos meses previo al viaje. River, el equipo de mis amores, volvia a disputar una copa internacional, y en este caso el Mundial de clubes, el torneo mas importante a nivel internacional.
El debut era el 16/12/2015 en la semi final, frente al local, el Sanfrecce Hiroshima, en el estadio de Osaka.
Con el tren bala, desde Tokyo, tuve un viaje de 3 horas hasta llegar a la estacion Nagai-Osaka, ubicada a una distancia de 500 km aproximadamente del centro de Tokyo. De Tokyo sali alrededor de las 9am para llegar al mediodia a Osaka.
La idea principal era, aprovechar unas horas, ya que River jugaba a las 19pm, hora local, y recorrer un poco de la ciudad de Osaka. Al llegar tipo 13pm, los nervios eran muy grandes. Tenia que retirar las entradas, a lo que se sumaba una nueva excusa para que mis nervios aumentaran. Por lo que fui directo a la cancha, consegui las entradas y me quede ahi. No podia estar recorriendo una ciudad, con la cabeza puesta en el partido y los nervios no me dejaban hacer nada. Por lo que hice tiempo, entre a la cancha pasada las 15pm y aguante el frio. Por suerte a las 16 pm, estaba el partido por el 5to puesto, por lo que me pude entretener unas horas, aunque el tiempo no pasaba mas.
La gente iba llegando, los nervios iban incrementandose, y las canciones empezaban a asomar. La cancha estaba vacia, pero las 20 mil personas, hinchas de River, por suerte estabamos todos juntos, por lo cual nos hicimos sentir. Nunca senti lo que vivi momentos previos al pitazo inicial. La cantidad de gente que habia, estando al otro lado del mundo, literal, me ponia la piel de gallina. No paramos de cantar, los guardias locales no podian creer lo que veian. Habia 500 hinchas del equipo nipon, ubicado al otro lado de la cancha, a los cuales claramente tapabamos totalmente.
Es inexplicable la sensacion, la experiencia, la emocion, la alegria, que senti antes de que empezara el partido, cantando, saltanto, todos juntos por los mismos colores.
Cuando empezo el partido en mi interior todo cambio. Empece a sufrir demasiado, no pude disfrutar del contexto, ademas de que el equipo jugo muy mal y no ayudo a que me relajara. Faltando unos 15 o 20 minutos aparecio el salvador Alario, y nos dio el unico gol del partido, que sirvio para ganarlo.
Ahora si, cuando termino, volvio la locura incial, la emocion, la algarabia, de poder estar en la final y enfrentar al mejor equipo de la historia del futbol mundial, creo que no vale la pena aclarar quien es.
El partido termino alrededor de las 21 pm, y yo tenia un tren nocturno reservado a las 00:00. Me quede un rato cantando en la cancha, hasta que los jugadores se fueron. Ahi saliendo de la cancha, me quise hacer el piola, y me separe de la gente, pensando que conocia otro camino a la estacion, lo cual no fue asi.
Termine perdido por Osaka alrededor de las 22 pm, hasta que por fin encontre una calle angosta, que me dejo en la estacion Nagai, en la cual me tendria que tomar un tren, que me llevara a la estacion central de Osaka, donde podria esperar tranquilo el tren de la medianoche.
El tren iba cargado de hinchas de river, los vagones exclusivos para mujeres, quedaron cargados de pasion y alegria traida por los argentinos. Al llegar, me quede haciendo tiempo en una plaza, tomando mucho frio, y comiendo unos fideos asquerosos que compre en un supermercado. A la medianoche, tomo el tren, el cual tenia una mini habitacion individual, que tenia lugar para una cama de una plaza, un perchero, y una especie de mesa de luz. Una ventana gigante, en la cual podia ver el camino, cerraba el cuartito. Mi primera experiencia en trenes nocturnos, donde pasar la noche, fue increible aunque demasiado agotadora al otro dia.
Lo proximo seran los dias 3 y 4 en el barrio de Shinjuku, y en el Universal Studios de Osaka Japon.
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